68-75: Cuarta victoria seguida en la Euroliga
El Real Madrid, liderado por Heurtel (15 puntos y 22 de valoración) y por Rudy en defensa, se impuso al Zenit en el primer partido de la doble jornada en Rusia.
![68-75: Cuarta victoria seguida en la Euroliga](https://publish-p47754-e237306.adobeaemcloud.com/adobe/dynamicmedia/deliver/dm-aid--0c03e0a0-903d-4f7f-85e2-044172e01b9d/_330749156910.app.png?preferwebp=true)
El Real Madrid abrió la doble jornada de Euroliga de esta semana en tierras rusas con una victoria en la cancha del Zenit de San Petersburgo, la cuarta consecutiva y la quinta en total. Los de Laso, que se estrenan así a domicilio, se llevaron un importante triunfo en un partido muy exigente que desnivelaron en la segunda parte. Heurtel, en su mejor actuación de madridista 15 puntos y 22 de valoración, lideró un ataque muy repartido con Tavares 14, Causeur 13 y Yabusele 11 en dobles dígitos. Rudy brilló en defensa, con una actuación espectacular 4 robos. En menos de 48 horas, visitamos al Unics Kazan.
Buena salida madridista, muy centrados atrás y con clarividencia en ataque, donde el juego pasaba siempre por un inspirado Heurtel. El base francés impuso el ritmo que quiso y estuvo impecable en el tiro 7 puntos sin fallo, como todo el equipo con porcentajes muy altos en torno al 70%. El Madrid repartió 7 asistencias y recuperó 4 balones, dos datos que indicaban su bienestar en el primer cuarto. El Zenit, tapados sus referentes ofensivos Frankamp y Llolyd, se aferró a Mickey para sobrevivir en este arranque 13-22, min. 10, en el que Tavares 6 y Causeur 5 fueron los otros destacados en los de Laso.
Aprieta el Zenit; resiste el Madrid
Los rusos se vinieron arriba en el segundo cuarto gracias a su gran acierto en el triple, que marcó claramente el desarrollo del partido hasta el descanso. Lanzados por Baron y Zubkov, con 5 triples seguidos entre los dos, recortaron la desventaja ante un Madrid que oponía resistencia con los puntos de Alocén 5 y dos triples de Abalde. Los de Laso ya no tenían tanta continuidad ni fluidez en ataque y empezaron a sufrir en el rebote, permitiendo segundas opciones a un rival que también hizo daño en la pintura con Gudaitis 40-39, min. 20. Lo mejor en este periodo fue la vuelta de Llull tras su lesión en el hombro.